Cómo lidiar con un jefe molesto

Conozco un departamento que mantenía perdiendo gente talentosa, una tras otra. Esto no era un misterio realmente. El jefe era un completo idiota. ~ A.A.

En ocasiones los directores recién nombrados entran a una empresa, un hospital o cualquier otra organización, creyéndose los dueños del mundo y se convierten en el peor dolor de cabeza que puedas recordar. Los jefes insoportables tienden a esparcir su autoridad por todas partes consumidos por el poder. Pierden de vista la realidad, convirtiendo la vida de los compañeros en un infierno. Si permites o das cabida a este tipo de influencia, tu vida laboral será miserable, más pronto que tarde. Aquí están algunas sugerencias para superar el efecto aplastante de tener gerentes excesivamente ambiciosos y molestos en tu vida laboral.

Pasos

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   Trata de determinar por qué encuentras a tu jefe molesto.
   Trata de determinar por qué encuentras a tu jefe molesto. Hay muchas razones, pero no caigas en la trampa de encontrar que tu jefe es molesto porque él/ella te pide que hagas tu trabajo al nivel que lo espera. Los sentimientos reales para denominar a un jefe como molesto dependen de cómo ha cambiado tu vida (y la de los demás) desde que llegó a denominarse ¨tu jefe¨. Por ejemplo, el lugar de trabajo se ha vuelto insoportable, es imprudente, no los deja disfrutar de sus labores y es hasta aterrador. Los signos de un jefe realmente molesto pueden ser:
   • Es una persona que no apoya al personal y trabaja para socavarlos. Incluso roba la gloria de otros para beneficio propio.
   • Es un jefe engañoso y deja de alabar a los trabajadores cuando tienen buenos desempeños.
   • Es una persona que pone en peligro el trabajo, que es desordenado y que deja todo para último momento.
   • Es un jefe que culpa al personal cuando las cosas salen mal. Nunca acepta una sola culpa o error.
   • Es un gerente que demuestra evidente favoritismo en el lugar de trabajo por unos trabajadores por encima de otros, sin ninguna razón aparente.
   • Es una persona que humilla, condesciende, degrada y ataca verbalmente a las personas.
   • Es un jefe que no le importa en lo más mínimo tu vida personal, y nuca te apoya si tienes problemas familiares o personales. Simplemente, te pide rendimiento.
   • Es una persona que actúa de manera superior todo el tiempo, creyéndose más que los demás y espera que todos se centren en él/ella.
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   Reconoce las acciones de un jefe molesto. Además de determinar cómo se comporta el jefe, y saber lo que ésto te hace sentir, es justo detectar ciertas acciones inaceptables que ellos cometen de manera regular. Pueden incluir acciones como:
   • Insultar a los trabajadores de una manera muy personal, a menudo públicamente
   • Invadir tu espacio personal sin pedir permiso
   • Amenazar verbalmente o no verbalmente
   • Enviar correos electrónicos que generan presión
   • Interrumpir reuniones de manera grosera
   • Dar miradas sucias
   • Actuar como si fuera invisible cuando le conviene
   • Pedir alabanzas
   • Criticar todo el tiempo o exigir perfección
   • Realizar bromas sarcásticas o burlar a las personas
   • Recordar siempre cuál es su posición en la jerarquía
   • Tocar a las personas del sexo opuesto
   • Manejar una doble faceta
   • Robar clientes o cuentas de otros trabajadores
   • Hablar mal de la cultura de la empresa
   • Negar ayuda
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   Mantén los ataques aparte de tu autoestima. Entiende que generalmente los ataques de tu jefe no son en contra tuya, ni de manera personal. Muy a menudo, los gerentes están buscando el rendimiento integral de la compañía, además, de mostrar a su vez a sus superiores buenos resultados de su labor, por tanto, se enfocan en la persona que no esté permitiendo este logro. Un jefe puede venir por la oficina o departamento, en busca de errores para descalificar o desacreditar a quien considere una amenaza potencial. Es vital que no te tomes nada personal, aunque parece que realmente lo es. Simplemente míralo como un complejo de inferioridad de tu jefe, el cual tiene que escudarse en los trabajadores para cubrir sus propias faltas. A esto se le conoce como "replanteo", y reduce el daño que te produce su actuar.
   • Robert Sutton explica que el truco es no esperar que tu molesto jefe cambie (que es muy poco probable que ocurra), sino esperar lo peor de él/ella. De esta manera, estarás tranquilo enfocándote sólo en tu trabajo, en tus funciones y en tus mentas personales. Si te esfuerzas en hacer tu trabajo lo mejor posible, probablemente tu jefe tendrá muy pocas razones para determinarte, ¡lo cual sería lo ideal después de todo!
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   Sé un empleado modelo. Familiarízate con los protocolos de tu trabajo y comprende los principios detrás de lo que haces. En otras palabras, trata de estar dispuesto a ofrecer una explicación plausible si eres interrogado por tu jefe. De esta manera, lograrás que él/ella te vea como un elemento neutro, que se enfoca en lo que le compete.
   • Conoce el cien por ciento la descripción de tu trabajo, y sé capaz de responder efectivamente por lo que estás haciendo en éste. Puede sonar tonto, pero existe un gran número de personas que no comprenden su papel en el trabajo en su totalidad. Éstos empleados, pueden convertirse en un blanco fácil del ataque de un jefe. Por tanto, enfócate en tu labor, con esto, siempre tendrás formas de defender lo que hiciste de una manera sólida. Sin perder de vista que puedes estar siendo candidato para un ascenso. ¡Nunca se sabe!
   • Gana respeto mostrando confianza en tus funciones. Sé organizado y administra tu tiempo eficientemente.
   • No des oportunidades para que tu jefe te llame la atención. Sigue las políticas de la empresa y no rompas reglas. No llegues tarde, no salgas a destiempo, no hables con tus compañeros de trabajo sobre temas ajenos a la labor, no abuses del teléfono, etc. Conoce muy bien los plazos de entrega de tus informes y avisa con tiempo los posibles pormenores. No dejes nada para último momento. No le des motivos a tu jefe de que te critique. El interés de un empleado se nota.
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   Demuestra tu experiencia sin arrogancia. De manera sutil, supera a tu jefe y a su conocimiento. Con mucho respeto, muestra a tu jefe que él/ella está equivocado. Nunca armes un conflicto, ésto te puede costar el puesto. Si tu jefe es sensato, no discutirá contigo y asimilará que tienes razón. Si es una persona terca, hará lo posible por mostrar su superioridad, de ser así, no te esfuerces mucho en contradecirlo y cumple con explicarle tu punto de vista y ya. Piensa en que si estableces una discusión con él/ella, tú tienes todas las de perder.
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   Mantén una distancia profesional y limita tu contacto con tu molesto jefe.
   Mantén una distancia profesional y limita tu contacto con tu molesto jefe. Buscar familiarizarte mucho con tus superiores, demuestra una clara falta de liderazgo. Conserva tu distancia y sé prudente.
   • No hables mucho. Muchas veces nos sentimos tentados de comentar nuestros asuntos a los miembros de la oficina, pero, es bueno pensarlo mejor antes de hacerlo. Las informaciones que se dan en las oficinas, suelen tener la tendencia de dipersarse por toda la empresa o lugar de trabajo. Así que evita a toda costa comentar tus asuntos personales. Éstos pueden ser motivos de llamadas de atención por parte de tu ya muy apreciado jefe.
   • Evita hacer reuniones con tu jefe, si es necesaria, que sea lo más breve posible. Procura que el lugar no tenga sillas.
   • Una buena cantidad de misterio resulta muy interesante para tu jefe. Intenta ser una persona reservada en tus asuntos. Eso no quiere decir que no hables con nadie, sino que no andes contando a cuatro vientos tu vida. Una persona eficiente y reservada siempre resulta ser un elemento que genera curiosidad a los superiores.
   • No cedas a convertirte en uno de los "favoritos" del jefe. El favoritismo nunca es bueno en las empresas. Por tanto, no permitas ser incluido en la lista de los consentidos. Cumple tu trabajo y listo. No pases de ahí. La alta dirección no te verá con buenos ojos si llegas a posesionarte con cierta preferencia.
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   Nunca critiques a tu jefe. No sabes quién está haciendo el papel de espía a tus espaldas. Así que si lo que deseas es acribillarlo con tus palabras, asegúrate de hacerlo con la persona adecuada.
   • Aprende a pensar con tus pies. Muchos jefes tienen muy pobres habilidades interpersonales. Este tipo de personas están obligadas a hacer preguntas en el momento más inoportuno y con cierta indiscreción. Recuerda que estás por encima de su falta de ética profesional, y dale respuesta a sus inquietudes con sabiduría y tranquilidad. No te alteres, y guárdate las ganas de matarlo para cuando estés encerrada en el baño.
   • Aprende a detectar cuándo alejarte. Si sientes que estás perdiendo la paciencia con tu jefe, y crees que habrá un homicidio en ese mismo momento, por favor ¡aléjate! Vete a fumar, a gritar, a golpear muros, a comer M & Ms, pero por nada del mundo te quedes discutiendo con él/ella. Discúlpate y sal con mucha educación, después ¡estrangula al primero que veas en el pasillo!
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    Tómate un momento de reflexión antes de confrontar a tu jefe
   Aprende a relajarte antes de hablar con ese jefe que sabes que seguramente te molestará. Estar nervioso sólo te convertirá en un blanco fácil. Piensa bien cada cosa que le vayas a decir. Tómate tu tiempo, respira y actúa.
   • No te percibas a ti mismo como una víctima. Aprende una cosa desde ya, tu jefe es molesto y es algo que no puedes controlar, pero sí lo puedes manejar, por tanto, sé lo suficientemente inteligente de no permitirte verte como una víctima de un jefe que te está atacando, y que lo hace de manera personal. No lo veas así.
   • Date cuenta de que mantener la calma puede enfurecer a una persona que no tiene la capacidad de controlar su propia ira. No dejes que su falta de auto-dominio te ponga nervioso.
   • Encuentra aliados. Busca con mucha delicadeza y audacia personas con las cuales puedas hacerle frente a tu molesto jefe. Es muy importante que confíes mucho en esas personas.
   • Haz meditación o cualquier otro método de relajación.
   • Respira profundamente y cuenta hasta diez antes de responder a una burla o ataque. Piensa en las grandes personalidades cuando les hacen una pregunta de doble sentido, y ellos responden con calma sin permitirse alterarse.
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   No seas presa de chismes en tu lugar de trabajo. No des motivos. Si tienes que discutir con algún compañero, hazlo decentemente y con cuidado de no generar enemistades. Ojalá sea en privado. No querrás que una nota negativa invada tu curriculum. Nunca hables de nadie por más que desees y por más que esa persona dé motivos. La información en los lugares de trabajo tienen facultad propia de esparcirse, infiltrarse y distorsionarse rápidamente. Sé neutral, llévatela bien con todos en la medida de tus posibilidades, ten cuidado de no caer en la falsa amabilidad. Cuida mucho tus comentarios y no permitas que tu reputación se vea afectada.
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     Encuentra zonas de amortiguamiento.
    Encuentra zonas de amortiguamiento. Halla un lugar donde tú y tus colegas vayan a distensionarse y encuentren el espacio de relajarse después de un contacto con el molesto jefe.
    • Sólo ten cuidado de que esta zona sí sea verdaderamente segura, y que no existe la posibilidad de que tu jefe esté presente o tenga algún tipo de informante infiltrado en el grupo. Si es así, busca un parque, una cafetería etc. Por ejemplo, las enfermeras se esconden en una sala común, donde los médicos no pueden entrar.
    • Procura aconsejar a los demás sobre no chismear acerca del comportamiento de tu molesto jefe. Es posible que dada la fama de antipático, tu jefe pase por ser mucho más que eso debido a un rumor que no tiene nada de cierto. Todos merecen respeto y que no se levanten falsos testimonios acerca de ellos.
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    Encuentra otro empleo si la situación se vuelve insoportable en tu actual trabajo. La primera opción es buscar vacantes en la misma empresa, si no hay algo disponible, busca en otro departamento. Al encontrar otro empleo, procura ser muy prudente acerca de los sentimientos hacia tu jefe. Nunca es profesional hablar mal de tu antiguo empleo.

Consejos

• Bajo ninguna circunstancia debes verbalizar tu enojo de una manera desagradable o falsa. Esto hará empeorar las cosas, si tu jefe llega a conocer el tema.
• Cree en tus propias capacidades. No dudes de tu propia confianza.
• Cumple con los plazos y demuestra tus capacidades como un miembro valioso del equipo de trabajo.
• Comunica abiertamente tus ideas. Evita el secreto ya que esto sólo va a crear sospechas y más dudas.
• Sé transparente.
• Actúa como si supieras lo que está pasando, incluso si no lo sabes. Esto te dará tiempo de ponerte al día y familiarizarte con el tema.
• Cuando trates de determinar por qué te molesta tanto tu jefe, ábrete a la posibilidad de que tal vez te recuerde a alguien que no te cae bien.
• Busca ayuda si así lo necesitas. Existen varias opciones en recursos humanos, asesoramiento al trabajador o sindicatos. Ve y pide consejos si te sientes mejor al hablarlo.

Advertencias

• No permitas que tu grupo de compañeros estigmaticen los jefes que se vayan posesionando sin darles la oportunidad de darse a conocer. No caigas en esa trampa de seguir este juego, todo mundo tiene la oportunidad de ser escuchado.